¿Cómo puede comprobar el rendimiento de sus aplicaciones?
Cada vez más empresas crean aplicaciones web. Tanto si están destinadas a los clientes como a los empleados internos, estas aplicaciones deben ser estables y eficaces. Lea todos nuestros consejos sobre el uso de la monitorización informática.
Protocolos de pruebas tradicionales
Fases de desarrollo de una aplicación
Existen tres fases en el ciclo de vida de una aplicación:
- la fase de desarrollo, dirigida por los desarrolladores: las personas que realizan la codificación
- la fase de aseguramiento de la calidad (QA): los que prueban la aplicación
- la fase de producción: la aplicación está disponible para los usuarios, lo que se conoce como Disponibilidad General.
Pruebas en la fase de producción
Básicamente, las fases están diseñadas para sucederse unas a otras en orden. Pero la presión del mercado hace que las empresas intenten acortar sus plazos de producción para lanzar sus productos más rápidamente. En algunos casos, las pruebas sólo se realizan durante la fase de producción. La aplicación ya está disponible, aunque todavía no se ha probado.
El riesgo de decepcionar por las prisas
Aunque es una buena idea seguir probando una aplicación que ya se ha lanzado al mercado, como propone por ejemplo la solución de monitorización Neosense, sigue siendo aconsejable probarla antes. Apresurarse en esta etapa sin duda ahorra tiempo, pero también corre el riesgo de tener un efecto decepcionante. Si surgen problemas de rendimiento, los usuarios se alejarán de la solución. Y será difícil recuperarlos, incluso después de haber resuelto el aspecto técnico.
Nuevos protocolos de prueba
Probar antes
La escasez de tiempo es indiscutible. Para ser competitivas, las empresas tienen que reducir el tiempo de comercialización y lanzar sus aplicaciones más rápidamente. En lugar de precipitarse en las etapas, es una buena idea llevarlas a cabo en paralelo. Métodos como el shift left y DevOps se han desarrollado teniendo esto en cuenta. Permiten integrar el tema del rendimiento en una fase más temprana del ciclo de desarrollo.
Fomentar la colaboración
El reto consiste en derribar la barrera que separa a desarrolladores y probadores. El objetivo es trabajar juntos y simultáneamente, identificar los problemas técnicos lo antes posible y desactivarlos. Para lograrlo, las herramientas de pruebas de rendimiento ofrecen una interfaz común para desarrolladores y probadores. Algunas incluso están diseñadas para ser lo suficientemente accesibles como para permitir que los propios desarrolladores prueben el producto. Es el caso de Neolad, herramienta de monitorización y segunda solución publicada por Neotys. Su ergonomía intuitiva la hace accesible a los principiantes.
Facilitar el desarrollo de scripts de prueba
El principio es sencillo: el software de pruebas simula casos de uso concretos creando usuarios virtuales. El objetivo es observar el comportamiento de la aplicación y su tiempo de respuesta cuando se conectan varios usuarios. Este análisis proporciona estadísticas precisas sobre el comportamiento del servidor. Permite realizar una prueba de carga para evaluar el rendimiento de la aplicación en situaciones reales. Los informes son claros y facilitan la rápida aplicación de las medidas correctivas adecuadas.
¿Cuáles son los beneficios para la empresa?
Mayor capacidad de respuesta
Las soluciones de software de pruebas fomentan un enfoque iterativo del desarrollo. Las empresas ya no pueden pasar meses desarrollando y probando un producto. Para cuando salga al mercado, ya estará obsoleto. Todo va más rápido y se trata de ser reactivo. Al optimizar su ciclo de desarrollo, la empresa puede responder a las condiciones del mercado en cualquier momento.
Pruebas más completas
Cuando las pruebas son más fáciles de implementar, la empresa está más capacitada para operar "justo a tiempo". Las pruebas son menos restrictivas, por lo que se realizan con más frecuencia y se prueban más cosas. A diferencia de los análisis de rendimiento basados en silos, el enfoque es más global. Todos los escenarios probados contribuyen a diseñar una ruta de usuario eficiente y de alta calidad.
Satisfacción de los usuarios
Una aplicación que funciona mejor atrae a los clientes y los fideliza. Y esta fidelidad es a menudo el núcleo de la oferta comercial. Tomemos como ejemplo una empresa de apuestas en línea como PMU. Todo sucede en directo. Los apostantes tienen que acceder a la interfaz para hacer sus apuestas hasta el último minuto. Y los resultados de las carreras deben revelarse a todos ellos al instante. El reto de la carga y el rendimiento de la aplicación en condiciones de gran afluencia es fundamental.
Optimizar la eficacia operativa
Los usuarios de las aplicaciones de comercio electrónico BtoC son clientes para la empresa. Por eso necesitan un cuidado especial. Pero las aplicaciones para uso interno también son una clave del éxito que no debe pasarse por alto. La aplicación iBus de la RATP, por ejemplo, es una herramienta de trabajo en el corazón de sus operaciones. Los conductores se conectan, consultan sus horarios e introducen sus tiempos. Hay una gran afluencia de personas a la vez cuando empiezan su turno. La herramienta debe ser lo suficientemente estable y fluida para garantizar unos tiempos de respuesta óptimos.
Conclusión
Las aplicaciones tienen un enorme reto de rendimiento. Se espera mucho de ellas: deben ser fluidas, accesibles en todo momento y de alto rendimiento. Para cada actividad, hay que calcular los escenarios probables para responder a estas expectativas y conseguir la aceptación de los usuarios. Estas pruebas deben realizarse ya en la fase previa a la producción, en forma de simulaciones, para optimizar el tiempo de comercialización y el éxito de las aplicaciones.
Artículo traducido del francés