¿El secreto de las empresas de éxito? Controlar su tasa de rentabilidad
El éxito de una empresa es el resultado de una combinación de factores: un buen producto, servicios de calidad y un posicionamiento acorde con su mercado objetivo. También es la personalidad y el saber hacer de un empresario y un equipo comprometido.
Pero desde un punto de vista contable y financiero, hay otros criterios a tener en cuenta, que determinan su salud y sostenibilidad, como la tasa de rentabilidad.
Si quieres conocer el secreto de las empresas de éxito, ¡no busques más! 👉
¿Qué es la tasa de rentabilidad de una empresa?
Para que un negocio tenga éxito, por supuesto, necesita clientes, pero eso no es suficiente.
Si generas un gran volumen de ventas, pero tu facturación es demasiado baja para cubrir tus costes fijos (alquiler, salarios, electricidad, telefonía, etc.) y variables (compra de materias primas, gastos de transporte en las ventas y compras, etc.), entonces puedes encontrarte rápidamente con dificultades.
El indicador que te permitirá evaluar la salud y sostenibilidad de tu empresa (también conocido como su rendimiento financiero) es su rentabilidad, o su tasa de rendimiento expresada en porcentaje.
Tasa de rentabilidad: definición
La tasa de rentabilidad de una empresa es un indicador financiero clave.
Este ratio se utiliza para evaluar :
- la capacidad de una organización para generar beneficios;
- o, por el contrario, las pérdidas, cuando se sitúa por debajo del umbral de rentabilidad.
Los diferentes ratios de rentabilidad
Existen varios tipos de índice de rentabilidad para evaluar la salud y la viabilidad de una empresa, como :
La tasa de rentabilidad económica (Return On Capital Employed - ROCE)
Esta tasa evalúa la capacidad de la empresa para generar beneficios a partir del capital invertido (fondos propios o deuda).
Este indicador mide el rendimiento de la actividad actual para determinar si la organización consigue explotar correctamente sus recursos para crear riqueza.
👉 Su fórmula de cálculo es la siguiente:
| ROCE = (resultado de explotación después de impuestos/activos económicos) x 100 |
Rentabilidad de los fondos propios (ROE)
Esta tasa de rentabilidad, también conocida como tasa de rendimiento de los fondos propios, mide la capacidad de una empresa para generar beneficios a partir de los fondos propios aportados por los inversores (propietarios, accionistas, etc.).
Este indicador es de especial interés para los inversores, ya que les ayuda a evaluar con precisión la rentabilidad de su inversión.
👉 Su fórmula de cálculo es la siguiente:
| ROE = (beneficio neto después de impuestos/patrimonio neto) x 100 |
Rentabilidad de las ventas (ROS)
La tasa de rentabilidad de las ventas corresponde al margen neto generado por las operaciones comerciales. Mide la capacidad de la empresa para generar beneficios a partir de las ventas.
Es un indicador importante para evaluar el rendimiento global de una empresa.
👉 Su fórmula de cálculo es la siguiente:
| ROS = (beneficio neto/ventas sin impuestos) x 100 |
Retorno de la inversión (ROI)
Este índice de rentabilidad, también conocido como tasa de retorno, mide el rendimiento de las inversiones realizadas por una empresa.
Este ratio financiero se utiliza para comparar las ganancias financieras en relación con las sumas invertidas en una operación.
Se calcula de la siguiente manera:
| ROI = [(beneficio de la inversión - coste de la inversión)/coste de la inversión] x 100 |
A continuación encontrará la fórmula para calcular el umbral de rentabilidad. Como recordatorio, se trata de la cifra de ventas que necesitas generar para alcanzar el punto de equilibrio.
| BEP = costes fijos/margen de costes variables |
💡 Consejo: para ayudarte con los distintos cálculos, existen paquetes de software de gestión que te proporcionan automáticamente los distintos KPI que necesitas para dirigir tu negocio y tus inversiones. Un ejemplo es Sage Active, una solución para pequeñas empresas que combina contabilidad, facturación y gestión comercial. Gracias en particular a Sage Copilot, su asistente de IA, te beneficiarás de potentes informes financieros actualizados en tiempo real.
Sage Active
¿Por qué es tan importante calcular la tasa de rentabilidad?
El cálculo de la tasa de rentabilidad es importante para evaluar la viabilidad de una empresa, el rendimiento de una inversión y para identificar los proyectos más rentables.
Esta evaluación se basa en el hecho de que el valor de una empresa depende de su rentabilidad, que es una garantía de buena salud financiera y viabilidad a largo plazo. Le ayuda a gestionar su empresa con conocimiento de causa.
Al mismo tiempo, la tasa de rentabilidad tranquiliza (o no) a los inversores sobre los beneficios potenciales que se pueden obtener.
Las ventajas de calcular la tasa de rentabilidad de una empresa
Calcular la tasa de rentabilidad de una empresa tiene muchas ventajas. Con este indicador se puede
- evaluar con precisión los resultados económicos y financieros actuales y, probablemente, futuros de la empresa ;
- realizar un diagnóstico financiero rápido, poniendo de manifiesto posibles problemas como márgenes demasiado bajos mediante el ratio de rentabilidad comercial, o costes demasiado elevados mediante el ratio de rentabilidad económica;
- tomar decisiones estratégicas en función de los ratios obtenidos y del margen de maniobra disponible. Esto puede implicar nuevas inversiones en las operaciones existentes, inversiones en nuevos desarrollos o la reducción de las operaciones deficitarias y la reorientación de las inversiones existentes;
- comparar estos ratios con los de otras empresas del mismo sector, para hacerse una mejor idea de su situación.
¿Y los inconvenientes?
Como todos los ratios, el cálculo de la tasa de rentabilidad también tiene sus inconvenientes:
- la fórmula no tiene en cuenta las posibles variaciones de los costes (gastos fijos y variables) ni los imprevistos;
- interpretaciones basadas en hipótesis, sobre todo para las inversiones a medio y largo plazo;
- falta de evaluación de los riesgos potenciales y del impacto de factores externos como las fluctuaciones del mercado, la inflación, las restricciones reglamentarias, etc.
Aunque el cálculo de la tasa de rentabilidad proporciona indicadores relevantes de la salud económica y financiera de la empresa, le interesa completar este análisis con otros indicadores.
3 estrategias para mejorar su tasa de rentabilidad
Hay varias palancas que puede utilizar para mejorar su tasa de rentabilidad.
En este caso, no se trata de cambiar las reglas de cálculo, sino de modificar su estrategia operativa.
Estrategia 1 - Optimizar los costes
Una tasa de rentabilidad baja puede estar vinculada a un nivel de costes fijos y variables proporcionalmente demasiado elevado en relación con las ventas generadas.
La solución para reducir estos costes es empezar por analizar todos sus costes, con el objetivo de identificar ahorros potenciales, por ejemplo :
- en costes administrativos ;
- en la compra de materias primas
- los costes energéticos.
Para conseguir estos ahorros, puede concienciar a su personal de la importancia de unas prácticas más frugales, renegociar los contratos con sus proveedores o desarrollar sus procesos mediante la digitalización de las operaciones de gestión y el uso de la inteligencia artificial.
Estrategia 2 - Aumentar los precios
Otra solución es optimizar su política de precios.
En función de las tendencias del mercado y de sus competidores, puede plantearse aumentar sus precios. Entonces, ¿por qué no dividir su oferta en diferentes gamas de productos y servicios, para mejorar su rentabilidad unitaria y global?
Estrategia 3 - Aumente su volumen de ventas
También le recomendamos que mejore sus ingresos aumentando su volumen de ventas. Esta estrategia suele requerir inversiones, con vistas a desarrollar tus equipos, aumentar tu capacidad de producción y optimizar tus procesos de distribución.
💡 Y para lograr una tasa de rentabilidad aún mayor, sé inteligente y combina estas diferentes estrategias: ¡reduce tus costes, aumenta tu volumen de ventas y tus precios!
FAQ
Para qué sirve calcular la tasa de rentabilidad?
La tasa de rentabilidad, indicador clave de la salud financiera y la viabilidad de una empresa, mide la capacidad de un proyecto o actividad para generar beneficios.
Aunque es importante cruzar este ratio con otros datos, en particular los del mercado, sigue siendo un criterio para evaluar la pertinencia de las opciones que hay que tomar.
También ayuda a los inversores a tomar las decisiones correctas comparando diferentes oportunidades de inversión.
¿Cuáles son las ventajas de utilizar la tasa de rentabilidad para gestionar su empresa?
Son muchas las ventajas de tener en cuenta la tasa de rentabilidad a la hora de gestionar una empresa:
- Puede utilizarse para evaluar los resultados económicos de la empresa;
- es una herramienta de diagnóstico financiero
- proporciona información precisa para la toma de decisiones estratégicas
- ayuda a determinar la viabilidad de un proyecto y la viabilidad a largo plazo de la empresa;
- Es una referencia útil para posicionar una empresa en relación con sus competidores.
¿Cómo puede mejorar la rentabilidad de su empresa?
Para mejorar la rentabilidad de su empresa, puede :
- reducir los costes fijos y variables
- aumentar el volumen de ventas
- aumentar sus precios hasta el punto que su mercado objetivo acepte;
- optimizar la gestión de la tesorería...
... ¡y por supuesto combinar estas diferentes estrategias!
Sus prioridades de actuación dependerán de muchos otros parámetros que deberá tener en cuenta a la hora de elegir su ángulo de ataque.
Tasa de rentabilidad: lo que hay que recordar
Dominar la tasa de rentabilidad es uno de los pequeños secretos del éxito empresarial. Un cálculo bastante sencillo le proporciona indicadores precisos de los resultados económicos, financieros y comerciales de su empresa y de su potencial de inversión. Te permite identificar formas de actuar sobre diferentes palancas cuando el ratio es bajo, o incluso negativo, o, por el contrario, consolidar una estrategia optimizando los costes y aumentando los beneficios.
Aunque el ratio de rentabilidad es un buen indicador de los resultados de una empresa, por sí solo proporciona una visión parcial de la misma. Por eso es necesario incluir en el análisis indicadores adicionales, como :
- margen bruto y margen neto;
- margen de ventas;
- necesidades de capital circulante
- flujo de caja previsto
- desviaciones de las ventas previstas, etc.
Artículo traducido del francés